Toda la semana he venido escuchando y leyendo sobre las terapias y sus excesos, que si son buenas, que si son malas, que ahora por todo quieren que los niños tomen terapias.
Es verdad, ahora esta de moda (por así decirlo) que en los colegios, nidos, jardines, etc, te recomienden las terapias, ya que, porque si el niño es muy tranquilo, es muy movido, habla poco o mucho y no se porque tanta cosa mas.
Lo cierto es que yo, al igual que muchos padres no concuerdo con eso, el niño es niño y tienen que dejarlo ser, no todos van al mismo ritmo y es imposible que todos sean iguales.
No todos se desarrollan igual y por lo que he podido ver, mucho depende también del tipo de crianza, es decir, si los padres son poco sociables, introvertidos, es imposible que los niños sean lo contrario, aunque de repente pueden existir casos que demuestren lo contrario (no lo se).
A mi parecer las terapias deben recibirse en casos que verdaderamente lo necesiten, como son los niños con autismo o con algún tipo de síndrome, que es muy recomendado porque les va a servir mucho para su evolución y de eso si doy fe, por que a mi enano, el segundo, le ha servido.
Mi hijo mayor nació con frenillo corto y le recomendaron operarlo y posterior hacer terapias de lenguaje, ya que le era difícil pronunciar las trabadas y la "R", nos recomendaron una terapista que iba a mi casa, la chica era buena, pero lamentablemente no tuvo feeling con mi enano y en vez de ayudarlo lo estresaba, con solo saber que le tocaba hacer terapias con ella (2 veces por semana) se ponía renegón, llorón, etc y lamentablemente tuvimos que hacer un alto para que pudiera descansar.
Nunca estuvimos de acuerdo con las terapias, pero era necesario y muy cierto lo que nos comento su profesora del pre-kínder, "es mejor que tome ahora terapia de lenguaje que esta pequeño y que los niños no se dan cuenta de la mala pronunciación, a tener que tomarlo cuando este mas grande porque sus compañeros lo estén fastidiando para que pronuncie bien", los niños son crueles sin querer queriendo.
Después de casi un año, nuevamente vino la recomendación, junto con dos o tres nombres de chicas que ya habían dado terapia a niños del mismo colegio y con buenos resultados. Llame a la primera y los honorarios estaban por los cielos, además que vivía en un distrito recontra lejos al mío, así que la descarte, con miedo llame a la segunda y los honorarios eran mas cómodos y lo bueno que estaba muy cerca a casa, así que concrete una cita para poder conocerla y que mi enano la conozca, lo evalúen y si él estaba de acuerdo la tomaba.
Gracias a Dios todo fue de maravilla, me recomendó solo una vez por semana, porque no necesitaba mas (en casa practicábamos bastante y tanto papá como mamá lo corregíamos siempre) y si mal no recuerdo, solo fueron 2 meses de terapia y ahí termino todo, en casa seguíamos corrigiendo, ya que si no se hace, la mala pronunciación se les vuelve un habito.
En el caso de los niños con habilidades diferentes si es necesario e importante las terapias tanto físicas como de lenguaje, pero tenemos que tener mucha suerte con las terapistas y te den la frecuencia de terapias a conciencia y las que realmente necesitan los niños, no todos tienen el mismo aguante o tolerancia.
En el caso de Joaquín, que es mi niño con Trisomía 21, él empezó a seguir las terapias desde los 2 meses de nacido, ya que una de las particularidades es que nacen con bajo tono muscular y es muy importante y necesario ayudarlos con ejercicios desde pequeños para que puedan ir desarrollando casi a la par con los niños de su edad.
No es fácil encontrar profesionales que tengan ese ángela de poder llegar a los niños, por suerte la que me recomendaron fue como caída del cielo, fue un milagro y hace honor a su nombre (Milagros), ella lo observo, lo evaluó y vio que Joaquín no necesitaba mas que una terapia a la semana, si, aunque se sorprendan. Joaquín tuvo un apgar 9 en las dos pruebas que le realizaron cuando nació y el diagnostico para certificar que tenia Trisomía 21, tuvo que ser con un examen genético, ya que respondió con toda normalidad al momento de nacer.
Ya tiene 1 año y medio y esta a punto de caminar, las terapias le han sido de mucha ayuda y la evolución que el a tenido es porque, es un niño que quiere hacer las cosas por el mismo, yo solo refuerzo como jugando lo que veo y lo que Mili me indica, pero todo el merito es de él, es un niño espectacular.
Hace un mes empezó con las terapias de cognición y lenguaje y esto porque es un niño que al igual que al hermano, se les soltó la lengua a los 6 meses, empezando con papa, mama. Estas terapias le sirven para seguir incentivando el habla y reforzando el tono muscular de la boca, la cognitiva para ayudar a centrarlos y aprendan a seguir pautas y prestar atención y concentración en las indicaciones que se les da.
Tiene un mes y va avanzando mucho, mi objetivo con Joaquín, es que reciba las terapias que necesita, se las refuerzo en casa como jugando y así en el menor tiempo posible estará listo para ir al nido sin problema alguno.
Sinceramente y como lo dije líneas arriba, no soy partidaria de las terapias, pero en el caso de Joaquín es necesario e importante, a mi me gusta que los niños sean niños, que disfruten de jugar, gritar, pelear, etc, la niñez es muy corta y deben disfrutarla al máximo, como tiene que ser, pero siempre respetando las reglas de los padres.
A seguir apoyando a nuestros niños para que las terapias terminen en poco tiempo.....